domingo, 9 de enero de 2011

La concentración de los más rápidos

Uno año más, los pilotos asturianos mas destacados en los últimos tiempos se reúnen en las fiestas navideñas. La concentración de los mismos tuvo lugar el pasado 28 de diciembre en Mieres. Desde temprana hora, los participantes del rally llegaron con sus mejores carrozerias, esperando con ganas y entusiasmo por la salida al rally que comenzaría a las 11 de la mañana. 

El rally, al igual que los pasados años, tuvo como objetivo la concentración de los mejores pilotos racing, al igual que la concentración de la aficción de este deporte, que tantos madrugones le ha suponido a lo largo del año. Alrededor de unas cuatrocientas personas presenciaron la concentración, muchas de ellas pudieron ver algunos tramos del rally en las pantallas gigantes situadas en Mieres, pero muchos otros se atrevieron a esperar en los mismos tramos para ver en directo el espectáculo que dichos pilotos muestran en cada carrera.

En la concentración se encontraban renombrados pilotos de la cuenca como Alberto Hevia, José Antonio (El Cohete), Tano, Gabino o Fuster, todos ellos conocidos por sus competiciones, aunque en la ocasión no se pretendía competir, sino pasarselo bien haciendo lo que todos ellos consideran como algo más que un deporte o una profesión. Los tramos donde tuvo lugar el rally recorrieron parte de la cuenca:  "Los Afilorios", "El Cordal", "Morcín" y "El Rancho" fueron los lugares en los que los pilotos mostraron  el control ante las curvas, aunque no todos tuvieron la misma suerte. Finalmente los pilotos se reunieron en el mismo lugar de salida. Allí los aficionados al mundo racing tuvieron la oportunidad de ver a sus pilotos preferidos de cerca y de ver por dentro sus coches.

A partir de las nueve de la mañana los pilotos fueron llegando a la "mayacina" de Mieres. Cada piloto fue acompañado por su equipo de mecánicos, al igual que en cualquier rally de competición. Los minutos antes de la carrera los mecánicos comprobaron que todo estaba listo para superar los tramos. Los pilotos aproveharon estos minutos para saludar al resto de pilotos, que en muchas otras ocasiones fueron sus mayores oponentes.                            
Los aficionados al racing aprovecharon la ocasión para ver de cerca a sus pilotos preferidos y a todo su equipo. Desde temprana hora llegaron grandes grupos de aficionados de las distintas partes de Asturias. Todos ellos preparados con sus cámaras, no dejaron ni un solo momento de prestar atención a todo aquello que los mecánicos hacian en los coches. Minutos antes de comenzar la carrera muchos de ellos se dispusieron a eleguir el mejor sitio cerca de las pantallas gigantes, pero otros se atrevieron a disfrutar de la carrera en vivo y en directo desde los mismo tramos. 










La salida tuvo lugar a las once de la mañna. El primer participante que dio pie a la carrera fue Alberto Hevia. Este fue animado por toda la fición en el instante en que toco el acelerador. Los primeros minutos de la carrera fueron de los más especiales, tanto por las ganas que pusieron los pilotos en la salida de la carrera, como la emoción que supuso la concentración de los pilotos en los aficionados.
La primera hora de la mañana resultó tranquila, los pilotos no tuvieron ningún problema en los primeros tramos, la meteorología aún no se había puesto en su contra. Hasta la primera media hora de la carrera no se produjo ningún adelantamiento, fue el piloto Gabino el primero en conseguir el primer puesto tras la salida.
En el cuarto tramo, que pasaba por "El Rancho", los pilotos aprovecharon la carretera para dar más espectáculo a los aficionados. Uno de los pilotos mas especializado en este tipo de acrobacias fue José Antonio, más conocido como "El Cohete". Éste demostro al público su manejo del volante con movimientos rápidos y peligrosos, pero al mismo tiempo medidos y controlados al máximo.
A las dos horas de carrera el tiempo cambió encontra de los participantes y amantes del racing. La lluvia, continuada durante hora y media, no hizo que la carrera finalizase, pero si que ocasiono a los pilotos más dificultad a la hora de coger las curvas. Pero para la afición la lluvia no fue un problema, como en muchos otros rallys los aficionados preparados con sus chubasqueros no dejaron de animar a sus pilotos preferidos.

La pasión y el seguimiento de la carrera por parte de los aficionados no dejo de sorprendernos ,al igual que en el resto de los rallys de este año. Las curvas se encontraban repletas de gente para ver muy de cerca todos los movimivientos de los pilotos, pero incluso, algún que otro atrevido se subió peligrosamente entre la maleza para poder fotografiar y grabar con todo detalle lo ocurrido en la carrera.
A medida que avanzaba la carrera los pilotos se fueron familiarizando con la carretera mogada, y de ahí sus derrapes y manejo en las curvas. No se pudieron ver muchos adelantos entre los pilotos, ya que no se pretendia competir, pero si mucha velocidad y juego en los diferentes tramos. Para muchos pilotos el recorrido de la cuenca no era nuevo, pero aún así, algunos sufrieron desperfectos.
El primero en abandonar la carrera fue Gabino. A pesar de haberse posicionado en primer lugar, una de las curvas del tramo de "Riosa" le jugó una mala pasada. Ya bien por la lluvia o un pequeño despiste, el asturiano colisionó con un árbol que se encontraba al borde de la carretera. Los daños solo los sufrió la parte delantera del vehículo, ya que el piloto se encontraba en perfecto estado, aunque un poco desilusionado por no poder acabar la carrera.
La segunda desilusión se la llevo al poco tiempo el piloto Fuster, quien por mala medición, se cayó al borde de la carretera del tramo "Morcín". Al igual que Gabino no sufrió ningún daño mas que el de su coche. Tras la colisión el piloto decidió unirser a la afición que se encontraba en el tramo para ver al igual que ellos el resto de carrera en vivo y en directo.
La carrera finalizó a las cuatro de la tarde en el mismo lugar de salida. Allí cada piloto se reunió una vez más con su equipo para comprobar que todo estaba en orden, aunque  los mecánicos ,tanto de Gabino como Fuster, se encontraron con más trabajo. El primero en llegar fue José Antonio, "El Cohete", aunque la afición no valoro solo eso, sino que aplaudió y recibió al resto de participantes con las mismas ganas y entusiamo.
Finalmente, los aficionados tuvieron la oportunidad de fotografiar y  hablar  con los pilotos,incluso de ver los coches  detalle a detalle. En la foto aparecen el piloto  Alberto Hevia, con uno de sus seguidores allí presentes. La concentración tuvo lugar hasta las seis de la tarde aproximadamente, y un año más se cumplió con el objetivo, sin ninguna dificultad grave, de unir a los aficionados del mundo racing.